A pesar de Mí
"Aunque nosotros seamos infieles, Dios permanece fiel."
- Pastora Flora Baeza
Muchas veces, cuando enfrentamos el día malo, nos permitimos decir cosas como que Dios ya no nos ama, que Dios no nos contestará nuestra petición, que todo nos sale mal, hasta que a los impíos les va mejor que a los cristianos. Cuando hacemos eso es porque estamos viviendo totalmente en un plano natural, pero nuestro pastor Alejandro nos ha venido enseñando que estamos diseñados para estar en un lugar diferente, un lugar alto, donde Dios nos ve y donde nuestra seguridad no está en lo que tenemos ni pensamos, sino que está en Él. Debemos estar seguros, no por quienes somos, sino por lo que Jesús ha hecho por nosotros, pero tenemos un problema: no conocemos a Dios profundamente y cómo es Él con nosotros.
Debemos tener una fe certera. Si entablamos una relación con Él y lo conocemos como Él es, no habría duda ni temor en nuestros corazones. Reconozcamos que Dios es Fiel y cumple sus promesas de generación en generación. Su fidelidad es que cumple sus promesas y jamás nos defrauda. Muchas veces nos ha sucedido que nuestros padres o personas cercanas nos hacen promesas que no cumplieron y reflejamos eso en Dios, pero cuando Él hace una promesa la cumple tal y como la hizo. Dios es inmutable, es decir, que no cambia, y no puede negarse a sí mismo.
La fidelidad de Dios no depende de lo que hagamos o tengamos, sino que Él es fiel porque es parte de su ser. Dios no es rencoroso ni nos avergonzará por nuestros errores, sino que vuelve a nosotros con amor. Sí, muchos de nuestros errores tienen consecuencias y debemos ser fieles a Dios, pero Él nos perdona y nos ama, a pesar de todo. No somos perfectos, pero Dios igual cumple su promesa.
Reflexionemos
¿Cómo has visto la fidelidad de Dios en tu vida?
¿Podés creer realmente que dios es fiel a pesar de tu infidelidad?
Versículos para reflexionar
Deuteronomio 7:9 - Isaías 25:1 - Apocalipsis 19:11 - 2 Timoteo 2:13 - Salmo 101:6
Oración
Padre fiel, he vivido con culpa mucho tiempo por mis errores. He permitido que mi mente piense que los días malos que vivo sean a causa de mis errores, pero Tu nunca me has faltado. Tú siempre me perdonas y estás presente. Eres bueno y fiel a pesar de mis errores. Ayúdame a estar convencido de esta verdad para vivir en libertad y hacer mi mayor esfuerzo por serte fiel así como Tú eres conmigo. No quiero conformarme con lo que he oído de Ti, quiero conocerte y tener una relación contigo para conocer tu fidelidad y amor. Amén.