Más allá de tu burbuja

"Es momento de salir (espiritualmente) de nuestra burbuja e ir más allá."

- Pastor Alejandro Castro

La gracia del Señor abre las puertas y el carácter las mantiene abiertas. Durante estos meses hemos conversado sobre cómo salir adelante y enfrentar la crisis, tomando las promesas del Señor y caminando por ellas. Debemos llegar a otro nivel y salir de nuestra burbuja espiritual, para conquistar algo nuevo en nuestra vida espiritual, yendo más allá de nuestros intereses y egoísmo. Tenemos una buena noticia, y es que la pandemia que estamos viviendo va a terminar, pero si durante la pandemia no hemos hecho algo que nos haga crecer, solamente hemos estado encerrados dejando el tiempo pasar. Tenemos que prepararnos para conquistar nuevos propósitos y lograr aquellos con los que hemos caminado. El mundo necesita personas que sirven al Reino de Dios y sale de sus temores y limitaciones para vivir según el diseño de Dios. Para lograr esto debemos salir de nuestro egocentrismo para lograrlo. Si nos enfocamos solamente en nuestras necesidades, no podremos abrazar una visión más grande, por lo que debemos levantarnos y salir de nuestra comodidad.

David fue alguien que se salió de su comodidad y abrazó un propósito más grande que sí mismo. Sus hermanos lo juzgaron porque no podían ver cosas más allá de sus propios ojos. Qué terrible es cuando alguien juzga tu historia porque conoce tus defectos. Pero así como Dios veía a David, nos ve a nosotros, y debemos cuidar que no juzguemos a otros por lo que nuestros ojos apenas alcanzan a ver. David aparentaba no ser el elegido, pero era él quien eventualmente mataría a un gigante y se convertiría en rey. Algo que parecía insignificante, era el inicio de un gran reino. A veces pensamos que ciertos trabajos o labores son pequeñas, pero tienen gran impacto y no podemos desvalorizarlas.

La iglesia está llena de luchadores que siempre vamos hacia adelante para ser cabeza y no cola, y hoy debemos dejar de esperar y comenzar a pelear por lo que es nuestro en el Reino de los cielos. La grandeza del hombre no está en sus bienes sino el propósito que tiene para con los demás. Podemos estar atravesando un entrenamiento y otros podemos estar cansados, pero hoy debemos despertar la pasión por servir a los demás y abrazar una causa de otra persona para hacerla nuestra. La Palabra de Dios nos dice que somos más que vencedores en Cristo y todo lo podemos en Él. Declaremos Su palabra en nuestra vida y vivamos las promesas y propósitos.

Reflexionemos

¿Qué has hecho diferente en este tiempo?

¿Te ves juzgando a otros constantemente?

¿Cuánto has hecho por los demás estos meses?

Versículos para reflexionar

1 Samuel 16:10-13 - 1 Samuel 17:26-29,33-37 - Filipenses 2:6-11

Oración

Señor, viniste al mundo a servir a los demás. Sé que tu propósito para mi vida es grande y para lograrlo debo seguirte y servir como tú lo hiciste. Tú me bendices porque eres bueno, no porque lo merezco. Enséñame a abrazar la causa de alguien más y amar a mi prójimo para vivir como tú nos has pedido. Anhelo hacer tu voluntad y ver tu Gloria. Amén.