Mi mejor momento es hoy

"El éxito es llegar al final de los días al lado de las personas que hemos tenido el privilegio de amar."

- Pastor Sixto Porras

Nuestro mejor momento en la vida es el que estamos viviendo. Podemos preguntarnos si este momento es realmente el mejor de nuestra vida, pero depende de cómo lo interpretemos, es cómo lo vamos a experimentar. Hay personas que al morir, nunca realizaron sueños, sino que solo existieron. Por eso debemos darle sentido y apropiarnos de nuestros años y vivirlos a plenitud. La productividad de nuestros años depende de nosotros y de cómo queramos vivirlos. La vida comienza cuando tenemos retos y tenemos sueños, fijamos la mirada en Dios y ponemos la mirada en el presente, entendiendo que el Señor quiere que vivamos los mejores años de nuestra vida.

Las crisis llegan cuando negamos la edad que tenemos. Muchos viven crisis en la adolescencia, los 30, los 40, etc. Ahí es donde comenzamos a tratar de parecernos a otros o tener miedo de quienes somos realmente. Algunos idolatramos la juventud y negamos el presente. La edad que tenemos es un regalo de Dios. Debemos poner nuestro corazón en el aquí y el ahora, para no angustiarnos, y vivir nuestros mejores años a plenitud. Si Dios nos ha llamado, vivamos apasionadamente lo que tiene para nosotros en los años que vienen.

Podemos ver hacia atrás, para sonreír y apreciar el camino que hemos recorrido. Podemos estar agradecidos por lo que aprendimos y vivimos, valorar los recuerdos. Pero no nos quedemos en el pasado, porque este no regresa. Podemos tener los mejores años de la vida pero si no somos conscientes, sólo estamos ocupados. Detengámonos a contemplar y conocer a Dios en el hoy. Construyamos un legado y tomemos decisiones que tengan sentido de eternidad e impacten a los que vienen detrás nuestro y que seamos recordados por cómo vivimos.

Soñemos, y no nos cansemos de buscar Su rostro, que lo veamos como nunca antes y su poder en nuestra vida crezca día con día. El éxito no lo determina cuánto acumulemos, sino el poder llegar al final de nuestros días al lado de las personas que tenemos el privilegio de amar. Vivamos con expectativa de recibir la herencia que Dios nos ha prometido. Terminemos lo que comenzamos, nuestra historia de vida no se ha terminado.

Reflexionemos

¿Qué estás haciendo con tu hoy?

¿Cuáles sueños querés cumplir que no has puesto en marcha?

Versículos para reflexionar

Salmo 118:24 - Josué 14:7-13

Oración

Señor, eres mi creador y Padre. Hoy quiero recibir con aprecio el regalo que me has dado de poder disfrutar la vida. Anhelo poder vivir el aquí y ahora, apreciando lo que soy hoy y recibiendo la promesa que tienes para mí en este momento. Te doy gracias por el pasado y espero con emoción el futuro, sabiendo que los mejores años de mi vida son ahora y para siempre. Enséñame a ver las maravillas de cada día y vivirlas a plenitud. Amén.