No te Olvides

"Dios nunca te va a enviar por un camino que no conoces si no te acompaña."

- Pastor Alejandro Castro

Naturalmente, los seres humanos comenzamos a olvidar cosas conforme va pasando el tiempo, pero muchas veces se nos olvidan cosas buenas y recordamos cosas malas. Para sanar el pasado necesitamos muchas herramientas y hacemos un gran esfuerzo, porque queremos olvidar las cosas que nos hirieron en el pasado, pero las cosas buenas las olvidamos muy rápido. Si alguien sabe cómo funciona esto es Dios, y en su Palabra nos dice varias veces “no te olvides” y nos llama a contarle a nuestros hijos y futuras generaciones que no olvidemos las cosas que Él ha hecho.

En ocasiones, cuando pensamos en los 40 años de Israel en el desierto pensamos en la desobediencia, que fue un castigo, muerte, rebeldía o falta de fe y no un tiempo de bendición. Esos 40 años fueron una gran oportunidad para formar una gran generación que tuviera una mentalidad transformada y nueva relación con Dios para que conquistara la Tierra Prometida. Esos 40 años fueron lo mejor que le pudo haber pasado al pueblo de Israel. Tuvieron que aprender a verse como personas libres, cambiar conductas y actitudes, aprender a tener fe y adorar a Dios, por ejemplo.

El Señor le dio al pueblo instrucciones claras y solo debían seguirlas. Él los mandó por un camino pero fue con ellos. De la misma manera Dios no nos envía a un camino que no conozcamos si no nos acompaña. A veces, por alguna razón, puede que las cosas se compliquen un poco para que Dios sea más grande y sepamos que es Él quien nos ayudó y no nosotros mismos. Si nos enfrentamos a cosas que son humanamente arreglables, Dios no tendría que intervenir en nuestra vida. Cuando pasamos una prueba bien difícil y ya estamos del otro lado, solo así podemos saber que fue Dios quien nos ayudó a atravesarla. Así que, cuando se levanten las aguas, preparémonos para saber que pasaremos a la Tierra Prometida de Dios para nuestra vida. Dios siempre toma una oportunidad para hacer algo grandioso en nuestra vida.

Para pasar estas aguas, nada más tenemos que prepararnos con fe, no con estrategia humana, sino con la obediencia de la voz de Dios. Tal como Dios le dijo a Josué que actuaran cuando lideraba a Israel, así hicieron, y cuando obedecieron, vieron la mano de Dios. Muchos estamos esperando a que las aguas bajen para cruzar, pero Dios quiere que metamos los pies para que veamos el milagro que surge a partir de la obediencia a Él. La fe no está en la cabeza, está en los pies porque requiere acción. Dios hará milagros en nuestra vida pero tenemos que hacer la parte que nos toca.

El Señor hoy nos dice “no te olvides”, así como le dijo a Israel que no olvidara todo lo que había hecho por ellos. Es fácil acordarse de Dios en el desierto, pero cuando hayamos salido de ahí, poco a poco vamos olvidándolo. Que no se nos olvide quién es el que ha actuado en nuestra vida, y que nuestras generaciones sepan para que caminen con Él también. Pongamos nuestros pies en el agua y Dios se encargará del resto.

Reflexionemos

¿Podés recordar cuándo fue la última vez que Dios hizo algo grandioso en tu vida?

¿Cuál es la parte que te toca hacer en este momento para ver el milagro de Dios en tu vida?

Versículos para reflexionar

Josué 2:24 - Josué 3:3-5 - Josué 3:13-16 - Josué 4:4-7 - Deuteronomio 6:10-12 - Jueces 2:8-10

Oración

Señor, a veces intento andar por mis propios caminos, pero solo Tu conoces la ruta. Quiero caminar bajo tu guía sabiendo que vas conmigo y Tus caminos son los que me llevarán a las promesas que tienes para mi vida. Que nunca se me olvide ninguno de tus beneficios, ni milagros, ni mandamientos, para poder contarle a las generaciones que vienen después de mí y conozcan tu bondad y poder. Gracias por tu bondad y tu justicia, gracias por tu amor que me ha perseguido. En el nombre de Jesús oro. Amén.