Una buena noticia para mí
El pecado no sólo deja huellas espirituales, también deja corazones quebrados. Jesús nos dice que Él al vendar esos corazones maltratados los sana y nos da libertad y vista para disfrutar de una vida plena su lado.
El pecado no sólo deja huellas espirituales, también deja corazones quebrados. Jesús nos dice que Él al vendar esos corazones maltratados los sana y nos da libertad y vista para disfrutar de una vida plena su lado.