Asombrados

Con el paso de los años, empezamos a perder el asombro por las cosas; incluso normalizamos lo que Dios ha hecho en nuestras vidas y lo que puede continuar haciendo. Las costumbres y las tradiciones impiden que la fe se active y, por ende, limitamos el poder de Dios y lo que tiene para nosotros. Escuchá esta enseñanza y descubre las verdades de dos historias maravillosas que asombraron el corazón de Jesús y que, por ende, llevaron a resultados sorprendentes.