Lo que necesitamos
Lo que necesitamos es quedarnos en la luz, cerca de Jesús. No podemos hacerlo solos; necesitamos al Espíritu Santo, necesitamos comunidad, necesitamos gente que nos recuerde quiénes somos en Él. Aislarnos solo nos deja vulnerables, pero en familia encontramos fuerza, perdón y gracia. Vivir en la luz es dejar que el fruto del Espíritu, con amor, gozo, paz, paciencia y bondad, guíe nuestros pasos y nos levante en medio de la crisis. La luz expone, sí, pero también sana y libera. Ahí descubrimos que su amor es más fuerte que cualquier sombra.